El polémico proyecto VIS, dentro del Vergel.

Polémica en el exclusivo sector del vergel por la aprobación de la construcción de dos torres de apartamentos de vivienda de interés social.

Informe especial cambioin.com

En estado de máxima alerta se declararon los residentes del sector del vergel, por el proyecto de vivienda de interés social que pretende hacer la empresa constructora Samoa junto con la empresa de los fajardo, denominado Vergel 78, serán 2 torres de 22 y 36 pisos para un total de 408 apartamentos de 43.5 metros cuadrados, en obra negra.

Según los residentes del exclusivo sector, el proyecto alterará de manera sustancial la vocación y estilo de vida del barrio, por eso iniciarán acciones legales para evitar que la construcción se haga.

Esta es la carta que enviaron a los residentes del vergel alertando sobre lo que está sucediendo:

Señores
Copropietarios y residentes
Barrio El Vergel

Apreciados señores:

Las Constructoras SAMOA y PROYECTAMOS y EDIFICAMOS promueven en las redes sociales y sus oficinas respectivas la venta del proyecto “VERGEL 78, Smart living”, ubicado en el barrio El Vergel, en la esquina de la calle 78 con carrera 17 (lote contiguo al nuevo parque, hasta la esquina del ingreso al proyecto Bijao).

La iniciativa consiste en un complejo de dos torres de 22 y 36 pisos, que contendrán 408 apartamentos de 43,5 metros cuadrados, los cuales se ofrecen a $136 millones, en obra gris, es decir, sin cocina, pisos, obra en madera, etc. 
El proyecto alterará de manera sustancial la vocación y estilo de vida del barrio. “Vergel 78” implantará 408 familias en un lote de menos de 1500 metros cuadrados, antecedente que les permitirá a estos u otros constructores, reproducir el modelo de negocio en los predios urbanizables que quedan.

La enorme densificación alterará la movilidad vehicular, congestionará el uso del escaso espacio público y estimulará la migración de los vecinos que creyeron encontrar en El Vergel un sector residencial tranquilo, amigable con el medio ambiente y ajeno a visitantes temporales, usuarios de plataformas de alojamiento.   

Los constructores ofrecen el mínimo espacio VIS, con el tope del precio. No lo hacen por altruismo o generosidad, sino para acogerse a los beneficios tributarios y subsidios oficiales que ofrece el rango. Los precios de venta del metro cuadrado, en obra gris, arrancan desde $3.12 millones, duplicando el promedio del rango, con acabados. En otras palabras, la tugurización de la propiedad horizontal, esta vez en el barrio el Vergel, con astronómicas utilidades para los constructores.

Los invitamos a analizar los caminos jurídico, cívico y administrativo a seguir, que contrariamente a lo que afirman constructores y curadores, protegen el interés general, sobre el particular con el agravante que al no tener un POT claro en esta materia permite a las autoridades  viabilizar cualquier tipo de proyectos en zonas donde la movilidad y seguridad ya son materia de preocupación para todos los residentes.

Fin del comunicado

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