Sí al Diálogo Consensuado y a la Paz Social.

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"La felicidad suprema en la vida es tener la convicción de que nos aman por lo que somos, o mejor dicho, a pesar de lo que somos". Victor Hugo, Los Miserables.

Debemos propender por una mejor gobernabilidad y governanza estableciendo unas directrices frente al país real con una sociedad más preocupada por su patrimonio natural, cultural, y un gobierno con justicia social más justo, participativo, incluyente, próspero, con equidad e igualdad, que busque y propenda por mayores beneficios y oportunidades en el desarrollo humano y que sea responsable con nuestros recursos naturales, sociales, históricos y culturales.

Unidos en permitir que  el desarrollo social, económico y ambiental, esté principalmente orientado y  fundamentado en la concertación de propósitos comunes, en el camino a la paz, a la reconciliación y al perdón, y que Colombia con su gobierno y la sociedad civil toda,  sea competitiva con eficiencia aumentando su productividad en los retos reales de un mundo globalizado.

Hay que buscar el diálogo y establecer acuerdos con verdaderas acciones para acabar con la confrontación violenta, donde en toda ellas, se violan sistemáticamente los derechos humanos y el derecho internacional humanitario, el mecanismo de resolución de los conflictos es útil  para posibilitar  la concordia, la tolerancia, la  convivencia, la paz, y así  curar las heridas que los conflictos sociales van dejando con la muerte de nuestros amigos, familiares, líderes sociales, campesinos e indígenas, integrantes de la fuerza pública que también son hijos del pueblo,  igual el despojo, el desplazamiento forzado, y toda esta situación de violencia, de desigualdad, de hambre, miseria y pobreza que sigue en aumento no solamente en Colombia, también en el mundo, para que nuestros hijos y jóvenes puedan  seguir con la  esperanza creciendo en felicidad y no en la guerra.

En nuestro caso, las Regiones deben apostarle a poner en marcha una política conjunta de cooperación descentralizada para el desarrollo regional, se presenta así una oportunidad estratégica para orientar la definición de alternativas regionales y locales, generando espacios concretos que tienen como propósito la prevención y contención de los conflictos sociales, como el que hoy se vive en las regiones por la convulsión social, que como protesta es legítima y ojalá se llegue a un diálogo urgente, concertado y que los acuerdos firmados se cumplan a cabalidad y donde se desarmen  los espíritus.

Igual, hay que buscar sin odios, sin resentimientos, sin sectarismos y con respeto a nuestras instituciones, para que se continúe buscando y promoviendo por las autoridades competentes el entendimiento entre los antogonistas del conflicto armado y desescalonamiento del mismo, para que nuestros hijos y las futuras generaciones tengan un mejor país, para vivir en paz.  

Para el proceso de búsqueda de salidas negociadas del conflicto social y armado que aún persiste en Colombia, la descentralización en el proceso de paz con  grupos insurgentes y otras  organizaciones al margen de la ley  y el Gobierno Nacional es un tema prioritario, recurrente y de primera línea que se debe resolver para la salud social del pueblo colombiano, hay que perseverar en las negociaciones de paz, con la participación de todas las fuerzas viva en reconstrucción de la sociedad colombiana.

Hay que recalcar  e insistir y hoy cae bien nuevamente,  este escrito de Gandhi,  para que todos unidos salgamos adelante y ojalá en medio de la protesta social,  que el gobierno y los manifestantes pacten, acuerden y que  esos  compromisos se cumplan para salir del escalonamiento del conflicto y  de esta  dificultad que agobia al país a pesar también  de la pandemia del Covid-19 que hoy tenemos globalmente.

"Voy a seguir Creyendo"

Mahatma Gandhi

"- Voy a seguir creyendo, aún cuando la gente pierda la esperanza.
- Voy a seguir dando amor, aunque otros siembren odio.
- Voy a seguir construyendo, aún cuando otros destruyan.
- Voy a seguir hablando de Paz, aún en medio de una guerra.
- Voy a seguir iluminando, aún en medio de la oscuridad.
- Y seguiré sembrando, aunque otros pisen la cosecha.
- Y seguiré gritando, aún cuando otros callen.
- Y dibujaré sonrisas, en rostros con lágrimas.
- Y transmitiré alivio, cuando vea dolor.
- Y regalaré motivos de alegría donde solo haya tristezas.
- Invitaré a caminar al que decidió quedarse.
- Y levantaré los brazos, a los que se han rendido.
- Porque en medio de la desolación, habrá un niño que nos mirará, esperanzado, esperando algo de nosotros.
- Y aún en medio de una tormenta,
por algún lado saldrá el sol.
- Y en medio del desierto crecerá una planta.
- Siempre habrá un pájaro que nos cante, un niño que nos sonría y una mariposa que nos brinde su belleza".

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